Síntomas de un pre-infarto.

Esta patología, también conocida como angina de pecho es una señal de que existe un problema arterial que necesita tratamiento de un cardiólogo.
Un pre-infarto es una enfermedad cardiovascular y se caracteriza al igual que un infarto por el fuerte dolor de pecho. El pre-infarto se origina porque hay una reducción del flujo sanguíneo al corazón.
Entre los síntomas comunes de un pre-infarto hay que mencionar:
-Dolor en el pecho o malestar de manera repentina. Se trata de una dolencia aguda, de opresión. Se extiende al hombro, al cuello, al brazo izquierdo o hacia los dientes. La sensación es como si un fuerte peso cayera encima del pecho y este último fuera a estallar.
Otros síntomas que también se asocian al pre-infarto:
Náuseas
Fatiga
Falta de aire constante, dificultad para respirar
Ansiedad, sudoración, palidez, desvanecimiento y angustia por creer que es una muerte inminente.
Mareos.
Transpiración.
Sensación de cansancio
No siempre que se padezca un dolor de pecho, es sinónimo de pre-infarto. Muchos dolores de pecho se asocian a otras patologías como neumonía, gastritis o flatulencia,  entre otros.
Las personas propensas a un pre-infarto son aquéllas que tienen antecedentes familiares, obesidad, vida sedentaria, colesterol alto, estrés, fumadores, y además también son factores de riesgo el tener una dieta rica en hidratos de carbono excesivos y grasas.
Para prevenirlo, es aconsejable tener una dieta mediterránea basada en pescados de mar, aceites de oliva y soja, fruta, hortaliza y cereales. Asimismo es de gran ayuda realizar ejercicio físico diario como caminar,  ya que ayuda a bombear sangre al corazón.

El
  pre-infarto puede causar la muerte, por tanto en el momento que se reconoce alguno de estos síntomas, se debe acudir de forma urgente a un centro de salud. Además si no hay un control médico de la angina de pecho, el paciente puede sufrir también un infarto de miocardio.

Fuente imagen ThinkStock.

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